La pieza
Esta pieza surge como respuesta al resto de joyas, todas ellas creadas de manera intuitiva e irregular. Moldeada en arcilla a partir de un fragmento de madera que encontramos en el taller, es el círculo perfecto que une los cuatro elementos de la naturaleza: agua, tierra, fuego y aire. Unos aros ligeros y perfectos, pero con una irregularidad sutil.
Todas las piezas están diseñadas manualmente con arcilla, y producidas en plata bañada en oro.